El papá del niño protagonista de este cuento es un papá P.A.V. ¡Un Papá de Alta Velocidad! Por la mañana: ¡cieloexpreshastalanocheeeeee! Por la noche: ¡unbesosuperexpresporquehedecontestar! Cada día es igual.
El niño se queja de que todos los días sean iguales, necesita un mimo no exprés, un mimo tranquilo y sin prisas, para disfrutarlo y saborearlo. Al final una mañana se plantará y le pondrá un stop en su salida diaria por su "necesidad urgente de mimos". Papá, entonces, recuerda que la paternidad es más que dar el desayuno y la cena.